Después del Concilio Vaticano II, se les pidió a todas las congregaciones religiosas católicas que pusiesen al día sus Constituciones. Las nuevas Constituciones de la O.C.S.O. fueron aprobadas por la Santa Sede en la fiesta de Pentecostés de 1990, sufriendo modificaciones en sucesivos Capítulos Generales.
Dicha Orden es un Instituto monástico íntegramente ordenado a la contemplación. Por eso las monjas/los monjes se dedican al culto divino … observando la vida monástica según se determina en estas Constituciones. Cst. 2